Dijimos que haríamos esto en nuestro tiempo libre, pero cada vez tenemos menos. Tenemos ropa preciosa y original con telas que no se ven en las tiendas y mucha ilusión porque el proyecto salga adelante. Eso sí, estamos aprendiendo un montón sobre instagram, lo que es políticamente correcto y lo que no, nuestras hijas se encargan de recordárnoslo cada vez que colgamos una foto y nos damos el primer like.
Quisimos que la primera colección tuviera el toque de la ropa que se ha fabricado toda la vida en Nepal, la típica tela de rayas que hemos visto en todos los mercadillos de verano. Nos la hicieron con la gama de colores que pedimos y la tejieron con doble nudo para que fuese más tupida que la que vemos habitualmente. Le dimos nuestro toque con los diseños y el resultado lo podéis ver en la web.